EMOVERE
2016/2019
Emovere es una palabra que proviene del latín y que significa remover, agitar, excitar, perturbar, conmover.
La caída de Lehman Brothers el 15 de septiembre de 2008 y la consecuente crisis financiera global, los mensajes de miedo y negatividad en los medios de comunicación, la pasividad política, la corrupción del estado o la aparición de internet en nuestras vidas definen parte del mapa contextual de los años de desarrollo de la generación millennial , también llamada “ generación deprimida”.
La salud mental está intrínsecamente ligada a aquello que nos rodea. Los trastornos mentales exógenos, aquellos causados por el contexto en el que vivimos, se han visto incrementados en los últimos años.
Uno de los mecanismos psicológicos que se activan dentro de la relación entre las crisis mundiales y la salud mental, es el de la frustración- agresión que puede llevar a agresiones y comportamientos antisociales como respuesta a una percepción de trato injusto. También puede funcionar a la inversa. Manifestándose reacciones de inhibición – pasividad evitando cualquier tipo de conducta antisocial. (Oliva et al, 2020)
Las obras de Emovere se realizaron durante y después de un momento psicológico delicado en la necesidad de encontrar un refugio alejado de la sociedad. Son cuadros que buscan explícitamente la confrontación , la lucha, la provocación y especialmente , el despertar de las personas.
La ira y la rabia buscan la rebelión del pueblo enmudecido e inactivo.
Con la seguridad con la que se definen los principios artísticos, Jaime tenía claro qué historias quería contar y cómo iba a hacerlo : A través de escenas de acción oscuras y violentas.
Basadas en imágenes de personas y lugares cercanos, bebe de las influencias del cine de David Lynch, las novelas de Michel Houellebecq o de las obras de Justin Mortimer.